Adolfo Bioy Casares pertenecio, por derecho de nacimiento, antes de convertirse en un escritor reconocido y respetado por todo el mundo, a una de las grandes familias argentinas; valdria decir, como correccion que no pertenecio a una sino a dos de las mas familias patricias de la oligarquia vacuna argentina: los Bioy y los Casares.
Gracias a la fortuna familiar, ya de pequeño, Bioy se acostumbro a viajar por literalmente todo el mundo y luego, casado con la poeta y cuentista Silvina Ocampo, continuo haciendolo a intervalos regulares aunque pocas veces fuera de Argentina, lamentablemente, con su gran amigo Jorge Luis Borges (este, ya casi ciego, preferia quedarse en la casa que los Bioy tenian en Mar del Plata y meterse, aunque no sabia nada, ocasionalmente en el mar).
En sus siempre precisos cuadernos de viaje, donde registraba cada hecho interesante con la intencion de escribir posteriormente sobre él (lo que daria como origen obras memorables como Todos los hombres son iguales), anota que fuera de casa somos mejores, diferentes.
Y el origen de la observacion es que, al despojarnos de las capas de imposiciones culturales que nuestros padres y figuras de autoridad nos hacen obedecer, podemos establecer relaciones mas verdaderas con los otros, sin tener que preocuparnos por fingir ser quienes no somos.
Aunque probablemente los CEOs de las grandes compañias no hayan leido los cuadernos de Bioy, seguramente tuvieron su misma idea porque ellos fueron los que impulsaron los llamados viajes de empresa.
¿En que consiste los viajes de empresa? Simplemente en un viaje en el cual el jefe y sus empleados podran reestablecer sus lazos de confianza y amistad originales incentivados por un ambiente bello y natural en el cual todo tipo de resentimiento se deshace porque no tiene razon de ser en un paraiso natural.
Visite nuestra pagina web donde encontrara seguramente todo lo que necesita saber al respecto y mas, mucho mucho, muchisimo mas: http://viajes-achina.es/
|